Todas las empresas temen la llegada de una crisis. Si tienes una o estás pensando en que vaya a iniciarse, seguro que también has sufrido este miedo. Pues bien, la preocupación disminuiría considerablemente si previamente elaborases un plan de acción frente a crisis. Este plan, te permitirá una mayor tranquilidad frente a la incertidumbre del mercado o imprevistos que puedan surgir por otras razones.
¿Qué es un plan de acción frente a una crisis?
Este plan de acción normalmente recibe el nombre de plan de contingencia porque se trata de mantener la empresa o negocio independientemente de las situaciones que tengan lugar. Ahora bien, ¿qué debería incluir este plan y cómo puedes elaborarlo?
En primer lugar, has de plantear una serie de actuaciones que consideres básicas y que no podrían parar, aunque la facturación del negocio disminuya como consecuencia del problema sobrevenido. Estas actividades, deberías mantenerlas a pesar de situaciones extrañas.
Después de considerar qué es imprescindible en tu empresa, tienes que elaborar una guía con pautas muy concretas de cómo actuar frente a situaciones críticas. Estas pautas deben incluir aspectos relativos a la organización, al aspecto técnico de la realización de tareas y al personal contratado.
Cuando todo está planificado, la empresa puede seguir actuando y salir adelante una vez que todo pase. El problema es que, en las situaciones de zozobra e incertidumbre, el miedo se apodera y si no has trazado antes un plan, es posible que tomes decisiones poco acertadas basadas únicamente en el miedo. Por ello, resulta fundamental invertir tiempo antes de que esto suceda para crear el oportuno plan de acción.
En definitiva, las crisis pueden afectar notablemente a los mercados y a los negocios. Por eso, te recomendamos que cuanto antes montes un plan de contingencia para conseguir una empresa más robusta frente a situaciones externas que no puedas controlar.