Desde el pasado mes de abril, Google ha empezado a penalizar a los sitios web que no tengan una versión de web móvil. La compañía justificó su decisión de actualizar su algoritmo aludiendo a los nuevos hábitos de consumo: el aumento del uso de dispositivos móviles para acceder a Internet hace necesario las web responsive. La penalización puede suponer un duro golpe al nivel del tráfico de una web, haciéndole perder visitantes y potenciales clientes.
El último Adobe Digital Advertising Report revela que el tráfico orgánico de las páginas que no son responsive ha disminuido en un 10%. El estudio indica que los clics en los anuncios de las webs sin versión móvil han caído en un 9%. Esto puede afectar negativamente a las campañas de mobile marketing de la empresa y a las de los anunciantes, que pagarán más dinero por posicionarse en webs donde los anuncios son menos rentables.
Otro estudio, esta vez de Catchpoint Systems, señala que el ajuste del algoritmo del buscador afecta también a los resultados que los usuarios ven desde el navegador en escritorio. Google da ahora más importancia a que una página tenga versión móvil que al tiempo que tarda en cargarse.
Google es cada vez más exigente en cuanto al diseño y la usabilidad de las páginas web. Un buen posicionamiento pasa por tener una web responsive y un diseño intuitivo. ¿Cómo saber si tu web cumple con los requisitos que Google pide? La compañía cuenta con una herramienta propia: Mobile Friendly –disponible en Webmaster Tools-, con la que puedes verificar que tu web es responsive. Tras realizar el test, la herramienta señala los problemas que tu web presenta y ofrece una lista de mejoras para optimizar el sitio. Aplicarlas te garantiza que la web siga posicionándose en el buscador y evita que pierdas tráfico.