¿A qué huele tu marca? ¿Y cómo suena? Quizás nunca te lo has planteado, pero estás ante una poderosísima herramienta para atraer a posibles clientes: estamos hablando del marketing multisensorial.
¿Qué es el marketing sensorial?
El marketing sensorial es una estrategia que busca apelar a los sentidos para generar el deseo de compra. Y para ello se vale de situaciones, ambientes o mensajes mediante los cuales los consumidores puedan experimentar una serie de sensaciones que queremos ligar a determinados servicios o productos.
¿Y por qué es tan importante esta estrategia? Porque las emociones son capaces de impactar sobre el recuerdo mucho más eficazmente que la razón.
Las ventajas del marketing sensorial
Estas son las principales:
– Construye y refuerza la identidad de tu marca.
– Te diferencia frente a competidores.
– Atrae la atención de compradores potenciales.
– Fideliza al cliente.
– Incrementa el tiempo de estancia de tu público en el punto de venta.
– Crea experiencias positivas.
Aplicaciones del marketing sensorial
Visualmente hablando, la presentación de los productos es fundamental: los colores, formas y tamaños hacen que la imagen y el mensaje perduren en la mente de tu público. El diseño de una web corporativa, por ejemplo, busca que el cliente recuerde la experiencia más allá de la compra en sí.
Por otra parte, puedes estimular el oído con melodías o canciones agradables para hacerte con la confianza del consumidor. Los logos sonoros que representan marcas son el mejor ejemplo.
Ligar un producto con un determinado aroma también hará que tus clientes lo recuerden siempre. Visualiza una taza de café, su espuma, el humo… Casi puedes olerlo, ¿verdad?
Pero lo dicho en el párrafo anterior también es útil para estimular el sentido del gusto. Si tienes un restaurante, sabrás cómo hacerlo. Pero también puedes asociar tu marca a un sabor determinado mediante textos o imágenes que lo evoquen. Salado, picante, dulce, amargo… ¿A qué quieres que